El Tribunal de Cuentas censura a Defensa por su falta de rigor presupuestario

el + Detalle ...

Fuente: Infodefensa

Como en otros artículos hemos denunciado, el gasto militar presupuestado (por cierto que disfrazado en partidas de varios ministerios para que parezca que el gasto militar es menor) supone tres veces menos el que se realiza anualmente (no está mal si tenemos en cuenta que el presupuesto de misiones de injerencia en el exterior es cincuenta y cinco veces menor que el gasto para este capítulo).

Esto implica una directriz política clara de disfrazar el gasto militar mediante el mecanismo de ocultarlo en partidas dispersas del presupuesto y en partidas extrapresupuestarias y no sometidas a ningún control.

Tan escandaloso es el método de ocultación presupuestria del Ministerio de Defensa que el propio Tribunal de Cuentas ha criticado dos aspectos de la arquitectura opaca de éste:

  • el desproporcionado número de órganos de contratación (que sirve básicamente para manipular los concursos y dar a dedo)
  •  y el desproporcionado, poco realista y falto de rigor gasto y presupuesto en materia de misiones en el exterior de las FAS (el crédito inicial para 2009 y 2010 fue de algo más de 16 millones de euros y el gasto final de 788 millones, es decir, 55 veces más).

No hemos tenido acceso al informe del tribunal de Cuentas y, por lo poco que extracta EFE e INFODEFENSA, da la impresión de que su lenguaje burocrático no acaba de llamar al pan pan y al vino vino, pero así y todo es destacable que un órgano fiscalizador de las cuentas públicas se atreva a decir por primera vez que entre lo que presupuesta defensa y lo que gasta las distancias son siderales y que esto es irregular (decir esto es insinuar que hacen trampas y no que sean unos mantas y no saben sumar, lo cual es precisamente una buena explicación de la realidad).

Veamos el caso: Presupuestan un gasto que resulta ser en la realidad cincuenta y cinco veces más grande de lo presupuestado.

Esto no es despiste ni incompetencia, sino pura artimaña para seguir cacareando que el gasto militar es pequeño en comparación con el de nuestros vecinos (a no ser que ellos también hagan trampas en sus presupuestos) y así justificar la creciente voracidad de la política de defensa que nos está llevando a la ruina (en la actualidad 37000 millones de euros de deuda comprometida en armas que no se pueden pagar porque no hay dinero para ello).

Tal vez los militares, a los que se les escatiman derechos y hasta poder adquisitivo, piensen que se gasta poco en defensa (con lo que sirven al interés del ministerio de reclamar más gasto militar y no denuncian el abuso existente y el exceso de gasto inutil) en vez de ver, como es real, que se gasta demasiado, pero poco en dignificar sus condiciones y excesivamente en otras cosas. Tal vez es a ellos a los únicos que engañan con estas artimañas, una vez que el tribunal de cuentas desvela el desaguisado.

Esperemos que el Tribunal de Cuentas siga investigando el gasto militar real y sus disfraces y nos pueda dar claridad oficial sobre este despropósito que no ocurre en ningún otro ministerio y que no debería ocurrir en el de defensa.

Deja un comentario