44 millones más de pobres por el alza del precio de los alimentos

Banco+MundialFuente: Nueva Tribuna

Según ha destacado el presidente del Banco Mundial, el alza de los precios de los alimentos ha supuesto el incremento en más de 44 millones de pobres en el planeta y el riesgo muy elevado de malnutrición de la amplia capa de personas que viven con menos de un dolar y medio al día, cifra que el FMI y el Banco Mundial cifran como suficiente para salir de la pobreza extrema.

Dos comentarios se nos ocurren:

El primero, que cuando se habla de estas cosas se hace con tal neutralidad que parece que los precios suben porque sí, por designio de la naturaleza, y no por el papel fundamental que juegan los intereses económicos, los acaparadores de estos, los que negocian grandes fortunas desde la especulación en los llamados «mercados de futuro», los que cambian alimentos por armas u petróleo en sus transacciones, etcétera.

Con esta visión parece que en el alza de los precios nada tiene que ver el modelo que tenemos montado ni la situación de injusticia estructural del que los países ricos somos beneficiarios a costa de otros.

Y con ello lo que se hace es desresponsabilizarnos y desmovilizarnos en la lucha contra estas cuestiones. Parece que no tienen que ver con nuestros comportamientos, con nuestras vidas, etcétera y por tanto, no nos afectan ni nos permiten luchar contra esta situación.

El segundo, que tienen que ver con el simplismo y la hipocresía de pensar que con elevar la renta de las personas por encima de un dolar y medio al día ya está hecho todo, como si la pobreza fuera sólo una cuestión de tener más de un dólar y medio al día. Este planteamiento, que es el que mantienen los llamados «países donantes» en su miserable «ayuda al desarrollo» es uno de los motivos de que la pobreza nunca se reduzca ni acabe, porque nunca se combate en sus causas sino en la idiotez de los síntomas. Llama la atención comprobar la sospechosa coincidencia de destinos de esta cooperación de los países occidentales con los lugares donde se encuentran sus itereses comerciales o económicos (materias primas, mercados, etc.) o donde provocan guerras o de donde sus multinacionales obtienen gran parte de sus dividendos.

Un caso de responsabilidad que nos debería llevar a la movilización desde aquí para cambiar este tipo de cosas y para no colaborar con este esquema.

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