fuente: Diario exterior.
Un sujeto que se llama Martin Feldstein nos ofrece un artículo intitulado «Defense Spending Would Be Great Stimulus» («El gasto en defensa sería un gran estímulo») con ingeniosas propuestas para reactivar la economía mundial: Aumentar de forma brutal el gasto militar, que como se sabe es un gran estímulo a la economía, da trabajo y, puestos a ello, si el armamento se usa con inteligencia, permite una próspera reconstrucción de zonas devastadas.
La cosa sería poca cosa si no fuera porque el tal Feldestein es uno de los más influyentes académicos de Estados Unidos en materia de economía y porque este tipo puede muy bien sintonizar con los ideales keinesianos del presidente Obama.
Da que pensar este reflujo militarista y nos debe poner en guardia: frente al gasto militar desobediencia civil.